Tirando de hemeroteca #1: El Leicester City de los milagros
- Oscar Morales
- 25 dic 2024
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Óscar Gabriel Morales Barrera | 25/12/2024
Existen muchos regalos que uno puede pedir por navidad: un portátil, un libro, unos calcetines… Pero el Leicester City de 2016 quiso regalar algo más icónico: ser líder de la Premier League. El Leicester City es el único equipo de la historia de la primera división inglesa en ser colista en navidad un año para liderar el siguiente. Hoy recordamos la historia del mayor milagro que ha presenciado la Premier League en sus 31 años de existencia.
Como ya es común en Inglaterra, el Leicester City fue fundado en el siglo 19, bajo el nombre de “Leicester Fosse”. Los ‘zorros’ han sido siempre un equipo de media tabla-baja en la liga inglesa y conocido por ser uno de los equipos ‘ascensor’. Son el club con más ascensos a primera división del fútbol inglés con nueve.
Su historia moderna tiene comienzo en el año 2010, cuando el tailandés CEO de King Power International Group, Vichai Srivaddhanaprabha, compra el club. El Leicester se encontraba por aquel entonces en la segunda división y no fue hasta 2014 que lograron el ansiado ascenso tras 10 años de ausencia. Uno de sus intentos fallidos de los años previos es uno de los momentos más icónicos del fútbol inglés. En la semifinal del Play-Off frente al Watford el guardameta español Almunia paró un penalti en el 96’ para que al contragolpe Troy Deeney marcase el gol que eliminase a los ‘foxes’. Ese “Deeeeneeeeyy” todavía resuena por las calles de Leicester.
Al año siguiente lograron el ascenso como campeones de la Championship, comandados por Nigel Pearson, quien creó las bases del proyecto y que curiosamente sería su extraña destitución la que daría paso al milagro. La plantilla ya contaba con nombres propios como Kasper Smeichel, Jamie Vardy, Kasper Schmeichel o Wes Morgan que más tarde forjarían su nombre en la historia del club.
En la siguiente campaña consiguieron de manera milagrosa la permanencia. Para la 2015/2016 el dueño del club programó una gira de pretemporada por sus tierras con la intención de dar a conocer el club más allá de las fronteras inglesas. Esta gira tuvo un final catastrófico, después de que tres jugadores de su plantilla fuesen grabados mientras tenían relaciones con varias prostitutas. Entre ellos se encontraba el hijo del entrenador, James Pearson, lo que le costó el puesto a su padre. Lo que parecía una absoluta catástrofe no fue más que el comienzo de una cadena de acontecimientos que les harían levantar el trofeo a final de temporada. Su reemplazo fue Claudio Ranieri, quien venía de una desastrosa experiencia como seleccionador del equipo nacional griego. Para el inicio de la temporada llegaron jugadores como N’Golo Kanté y Shinji Okazaki.
El equipo tuvo un arranque de temporada descomunal, liderados por un Jamie Vardy desatado tras pasar en solo tres años de la tercera división al escalón más alto del fútbol inglés. Marcó 13 goles en los primeros 11 partidos entre Agosto y Noviembre, superando el récord que sostenía el holandés Ruud Van Nistelrooy. Con uno de los presupuestos más bajos de la liga y con seis jugadores a coste cero tomaron el liderato en la jornada 22. Las jornadas fueron pasado y el equipo se acercaba cada vez más a una hazaña histórica.
Sin embargo, los ‘foxes’ no pudieron celebrar el título en un estadio. En mayo de 2016 el Tottenham Hotspur, su principal perseguidor, empató a dos con el Chelsea en Stamford Bridge tras una actuación sobrehumana de Eden Hazard, lo que hacía matemáticamente campeón al Leicester. La plantilla celebró el título viendo el partido en casa de Jamie Vardy. Como se diría en Mr. Underdog, los bajoperros lo habían conseguido.
Nunca ningún club había pasado de ser colista de la liga unas navidades a ser el líder en las siguientes. Tal fue la proeza que su título le costó a las casas de apuestas 14 millones de libras tras tasar el título de los ‘zorros’ en 5000 a 1 a principio de temporada.
En el fútbol inglés se ha vivido muchas veces el relato de David contra Goliat, pero pocas veces David había arrasado con Goliat, y menos con tan pocas probabilidades de éxito. Sin duda, tendremos que esperar mucho tiempo para vivir algo remotamente parecido a lo que ocurrió en 2016. La historia del fútbol inglés tendrá por siempre la huella de aquel zorro que quiso sentirse un gigante durante un año.
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